lunes, 12 de agosto de 2013

¡Felicidades Hermanita!



Llevo desde el viernes haciéndole una serie de regalos a mi hermana Cris. Hoy ya lunes 12 de agosto, es su cumpleaños, y he querido que este año sea un cumpleaños especial.
Primero empecé por su preciado coche. La di un buen susto al creer la pobre que se lo habían robado, o que se había equivocado de coche, pero no, era el suyo, ni mas ni menos que le cambie el interior un poquito, y por suerte le gusto.

Después el sábado, tras caminar varias horas bajo el sol maravilloso que pega en Madrid como una buena ostia de medio día, me fui a comprarle unos trapitos para que aumentara un poco su vestuario.

Y el domingo… se que esperaba algo especial también, pero no se lo habrá ni imaginado hasta ahora que lea mi blog, que su regalo de domingo (ya prácticamente lunes, pero día de su cumpleaños) es que le voy a dedicar un post. Solo para ella, por su bellísimo día de cumpleaños.

Cuando llegué al mundo, después de tocar por primera vez con mis deditos la manita de mi madre, toque la de mi hermana. No se si fue así alguna vez, no he tenido oportunidad de saberlo, ni de preguntarlo, pero quiero pensar que fue así.
Tras morir nuestra madre, ella me lo ha dado todo. Me ha dado fuerza, me ha dado constancia, me ha dado disciplina y buena sabiduría. Me ha enseñado que con llorar no se consigue nada, y que con no hablar tampoco.
Me ha hecho llorar muchísimas veces, e incluso odiarla como se odia a una madre cuando te castiga sin salir de casa una semana.
Se ha aprovechado de mí por ser mi hermana mayor, pero también me lo ha dado siempre todo.

No hay ni un solo día que le agradezca, al cielo, o incluso si hay un dios, a el también, de tener los hermanos que tengo.

Ella es la persona más valiente y fuerte que haya conocido nunca. Es claramente mi ejemplo a seguir en la vida, junto con el de mis padres.
Se lo debo todo. Y dios quiera, que algún día se lo pueda devolver con creces.

Admiro su honestidad, su humildad, su manera de ser, su carácter ante la vida. Admiro cada cosa buena y mala de ella. Y si no fuera porque es como es, yo no estaría aquí. Ahora mismo ni si quiera estaría escribiendo esto. Pero porque puedo hacerlo y porque quiero, aquí va mi cuarto regalo de fin de semana.
Quiero regalarte un recuerdo que nunca olvides. Algo que puedas mirar cada día y sentirte feliz por ello. Quiero que veas los recuerdos que tienes con nuestros padres.
Que creas firmemente en que ellos están con nosotros. Que nos cuidan desde el cielo. Que siempre están a nuestro lado. Yo lo se. Y quiero que tú también lo sepas.

Caminaría millones de kilómetros si me lo pidieras. Haría mil cosas por verte feliz y darte lo que mereces en la vida. Lucharía contra millones de demonios por protegerte siempre. Dormiría una y otra vez en sillas de hospitales por no dejarte nunca sola. Y sabes, pese a como soy, o a la penosa persona que a veces me siento ser, que siempre me tendrás, para lo bueno y para lo malo. Para la salud y para la enfermedad, y si muriera antes que nuestro hermano y que tu, siempre os cuidaría allá donde este.

Eres y siempre serás mi hermana mayor. Eres la persona que mas admiro en la vida. Y hoy quiero que todo el mundo lo sepa. Y por si a nadie le ha quedado claro, mi hermana Cris, es la mejor del mundo.

Feliz cumpleaños!

domingo, 11 de agosto de 2013

La dejas marchar...

Passenger - Let her go -





Cierro los ojos y la última imagen que tengo de ti es ver como te marchas. Como te dejo ir. Y se que te quiero, pero te dejo marchar. Aun no entiendo por que hay que hacerlo así, aun no entiendo porque si se quiere a alguien, debes dejarlo ir.

Me aferro con mucha fuerza a la última vez que te vi sonreír, que te escuche hablar, que sentí tu mirada, tu risa, o tus palabras cerca de mí.

Y aun no entiendo ¿Por qué si se quiere a alguien, debes dejarlo marchar?

lunes, 5 de agosto de 2013

Vive




Cada día veo amanecer, y cada noche veo anochecer. Cada momento es único aunque nos parezcan iguales, y en tan solo un instante puedes perder todo lo que te ha costado conseguir en semanas, en meses, en años. Tan solo un instante basta para determinar o sentir que las cosas, son solo cosas, y que las personas vienen y van.
Es poco lo que al final tenemos, lo que al final nos queda, pero eso que no perdemos, esas personas que siguen ahí pese a todo, son lo que verdaderamente importa.

Muchas veces pienso que si mañana muriera no querría sentir que no he vivido la vida como me hubiera gustado, o como al menos podría haberla vivido.
Te dejas cosas sin hacer, palabras sin decir, y al final no te queda nada, solo el recuerdo que dejas a los que seguirán vivos.
No quiero morirme y sentir que no he aprovechado la vida, ni cada instante o momento que he podido. Palabras que no llegue a decir y aun quiero decirlas. Momentos que no viví y aun quiero vivirlos. Ver más amaneceres y más anocheceres.
Sentir como la brisa golpea mi cara en verano, y como el viento la congela en otoño.
Sentir más besos, más caricias. Vivir más momentos, vivir más miradas intimas, cómplices, secretas, o divertidas.

Y ser un héroe por un día para alguien. Salvarle la vida a una persona, o algo más fácil como salvarle a alguien de un mal día.
Sentir que mis palabras llegan a alguna parte, aunque esa parte sea yo misma. O regalar todos los consejos que se, a mis amigos y gente conocida.
Sonreír. Sonreír una vez y muchas más. Sonreír como hago cada día y hacerlo de verdad.
Contagiar esa alegría a los demás.
Dejar un legado, el mismo que mis padres me dejaron a mí, dejárselo a otros. Hacerles saber que la vida tiene un sentido y que no es un mito.

Cerrar los ojos y sentir que puedo soñar un día más. Y así cuando los abra de nuevo y mire a mí alrededor, vea que los sueños se pueden hacer realidad.
Vivir un día mas para la música. Con la música. Por la música.
Ayudar al que lo necesita sin pedir nada a cambio, solo una sonrisa.
Y tener un perro. Otro amiguito nuevo en mi vida. Otro compañero de historias. Otro colega con el que compartir mil y una aventuras por el mundo.

Si me vuelven a preguntar que quiero de la vida, lo se muy bien. Disfrutarla como pueda. Porque no se si habrá mas. No me interesa saber si habrá más. Yo quiero esta vida. Por muy mala o jodida que haya sido y que posiblemente será también, yo quiero esta vida.
Quiero volver a nacer en esta vida. Quiero volver a tocar con mis manitas la mano de mi madre. Quiero volver a ver su sonrisa, a escucharla reír, a verla bailar, a sentir todo su amor y a admirar la persona que tengo ante mi, que me dio la vida y que siempre lucho por una vida mejor para nosotros. Y volverla a conocer, aunque al final vuelva a perderla.
Quiero nacer aquí. Quiero tener a mis hermanos conmigo otra vez. Quiero conocer a mi padre a la edad de veinte tantos años y no arrepentirme de nada de lo que hemos hecho. O de lo que hagamos.

La vida es ahora. ¿Porqué no vivirla hoy?. Tal vez mañana ya no se pueda.

Y no me importa si me vuelvo a sentir rota. Forma parte de la vida. Hoy te caes, pero mañana te levantaras y serás más fuerte, más sabio. Y entonces sabrás que un día te tocara a ti enseñarle a alguien que caerse no es tan malo. Porque levantarse es aun mejor.
Tal vez hoy siga triste como la última vez que escribí en mi blog, o me siga sintiendo rota por dentro y algo débil con la vida, pero sabía que mañana dolería menos, y pasado mañana menos aun. Y habrá un día que ya ese dolor desaparezca, porque habrá cosas en la vida que nos curaran las heridas y nos harán ver que merecemos vivir y disfrutar de cada momento de nuestras vidas!