domingo, 9 de noviembre de 2014

No me imagino mi vida sin ti




No me imagino mi vida sin ti. Y es verdad. No puedo imaginármela sin ti. No puedo cerrar los ojos y pensar que ya no estarás mas en mi vida. No puedo aferrarme a esa creencia. A esa realidad. No puedo pensar que podría existir una vida en la que tú no estás en ella.
Así que no, no me imagino mi vida sin ti.
Tanto tiempo como me sea posible recordar siempre estarás en mi mente, en mi día a día, en mi vida.
A quien se pregunta si es posible vivir con dolor. Claro que lo es. Es muy posible y muy capaz una persona de poder vivir con dolor. Ya sea mucho o sea poco. Se llama “ser un luchador”.
Yo no se si lo soy. A penas me lo podría considerar. Pero si me preguntaran como vivo teniendo tanto dolor dentro de mi, diría que no lo se. No hago gran cosa. No me levanto cada mañana cojo una espada y me pongo a matar dragones.
Ni alzo mis alas y echo a volar.
Solo me despierto, salgo de la cama y vivo mi día a día lo mejor que puedo.
A veces cojo mi bici por las noches y me sumerjo en la oscuridad de las calles de mi barrio. Es algo que asusta, pero por unos minutos me hace sentir viva.
Poder hacer algo tan simple como pedalear es una sensación única y realmente fresca.
El corazón te late, los pulmones se llenan y se vacían de aire. Y algo tan fácil como respirar también es síntoma de que estamos vivos y que podemos comernos el mundo.

Yo siempre digo, “hoy salgo a comerme el mundo”. Y casi siempre vuelvo a casa habiéndome comido un donuts o una galleta, pero sea lo que sea, al menos ese día se que lo intente.
No desisto. No me creo que haya nacido solo para ver a la gente que quiero morirse. No me creo que mi vida a partir de ahora sea así. No me creo que lo único que pueda sentir dentro de mi sea dolor.
No me parece justo. Y se que la vida muchas veces no es justa, pero aun así, no me creo que solo deba sufrir.

Un libro me hace volar y soñar. Me lleva a lugares que jamás pensé visitar. Puedo ser lo que quiera por unas horas. Un elfo. Un jinete de dragón. Una princesa. Un mago poderoso. Un cazador de sombras. Hasta un vampiro que brilla a la luz del sol. Pero lo que no veo en los libros es que pueda ser una persona normal y corriente. Que pueda ser carol. Que pueda ser yo misma. Eso no me lo enseñan. Y entonces es cuando piensas que tú eres el escritor de tu propia historia. Que tu defines quien quieres ser y como quieres serlo. Que tu y solo tu, decides si lo que quieres en esta vida es tener solo dolor, o también sentir amor.

Hace tiempo escribí que no hacia falta saber que te estabas muriendo para querer vivir. Has de quererlo desde ahora y hasta el final de tus días.
Y aunque hay personas que me dicen que lo mío es solo palabrería y que no es fácil de hacer lo que uno dice, tengo que decir que es verdad. Pero en las palabras uno a veces encuentra el consuelo que las personas no nos pueden dar. No digo que sea fácil vivir, solo digo que has de querer hacerlo.
Yo no se lo que es tener una vida normal. Dudo de si alguien la tiene. Hay días que no quiero vivir. A veces recuerdo que eso para mi es lo único que quiero. Pienso que si muero este dolor acabara. Que no hay nada en el mundo que me ate a la vida. Que mi corazón ya no me pertenece. Y que mi vida tampoco.
Sentí como si mi alma me hubiera abandonado. Como si ya no existiera esperanza alguna para mí.
Pero entonces encuentro cosas a mi alrededor que me hacen saborear la vida. Personas que me hacen reír. Sensaciones de querer seguir volando. Situaciones que me hacen vibrar y querer gritar de alegría.
Momentos que no olvidare en la vida. Recuerdos que me acompañaran siempre. Y se que quiero tener mas de esos.
Ojala pudiera recuperar todo lo que perdí. Aquella niña inocente. Aquel corazón puro. Tanto amor que quería dar y que se perdió por el camino. Ojala pudiera recuperar mi vida. O las personas que se han marchado y ya no volverán.
Ojala cuando miro atrás no me doliera tanto. Ojala dejara de sentir este dolor algún día no muy lejano. Pero se que se puede vivir con dolor. Se que no es fácil, pero tampoco es imposible.

Mañana me levantare de la cama. Será un nuevo día. Puede que salga el sol o llueva, pero será un día nuevo para mí. Y de mi depende si quiero sonreír o no. Si quiero llorar o saltar de alegría. De mi depende disfrutar de cada momento como si fuera el ultimo, o al menos hacerlo lo mejor posible. De mi depende coger la cámara e intentar sacar buenas fotografías. De mi depende volver a disfrutar de mi trabajo y de cada concierto que puedo disfrutar. De mi depende volver a viajar y hacer lo que me de la gana como siempre hago. De mi depende si quiero vivir la vida, saborearla, disfrutarla, sentirla, amarla, aunque no me imagine una vida, mi vida… sin ti.